"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Actualidad
El CERMI participa en el Libro Blanco de la creación, formación y desarrollo de públicos de la cultura
Promovido por el Ministerio de Cultura y Deporte
17/06/2020
El CERMI ha sido invitado por el Ministerio de Cultura y Deporte a participar como operador social en la redacción del Libro Blanco de la creación, formación y desarrollo de públicos de la cultura, aportando sus consideraciones y propuestas sobre la extensión de los públicos culturales.
A propuesta de la Comisión de Cultura del Congreso, el Ministerio de Cultura y Deporte inició en octubre de 2018, en el marco del IV Encuentro Cultura y Ciudadanía, el proceso de elaboración de un “Libro Blanco de la creación, formación y desarrollo de públicos de la cultura”, con la intención de concitar una amplia participación de agentes y expertos del sector cultural.
En este proyecto colaboran asimismo las unidades del Ministerio competentes en cada ámbito: Subdirección General de Promoción del Libro, la Lectura y las Letras Españolas, Subdirección General de Coordinación Bibliotecaria, Subdirección General de Museos Estatales, Subdirección General del Instituto del Patrimonio Cultural de España, Subdirección General de Promoción de las Bellas Artes, Subdirección General de los Archivos Estatales, INAEM e ICAA.
Entre los objetivos del Libro Blanco se encuentran los de garantizar el derecho constitucional de acceso universal a la cultura y mejorar los índices de participación en la vida cultural de toda la ciudadanía; promover la inclusión de aquellos sectores en riesgo de exclusión; construir una ciudadanía formada y con sentido crítico, capaz de impulsar –cuantitativa y cualitativamente- la oferta cultural del país y estimular la excelencia del propio sector profesional, entre otros propósitos.
En su contribución al Libro Blanco, el CERMI señala que aunque la entidad no tiene públicos directos, sí incide en el ámbito de la producción y la provisión de bienes culturales para que se tome conciencia de la diversidad de públicos, que no son uniformes, y se genere una oferte inclusiva que no descarte a nadie por sus características personales o grupales.
La información sobre los públicos que acumula el CERMI viene dada por el seguimiento de los consumidores culturales con discapacidad, de los que a través de sus quejas, denuncias y protestas, o sugerencias o planteamientos de mejora, señalan los déficits o los recorridos de perfeccionamiento de la oferta cultural disponible. Se realiza un rastreo de casos y supuestos a partir del reporte de una tupida red más de 8.000 entidades (asociaciones y fundaciones) de la discapacidad en toda España.
Para ampliar la base de los públicos culturales, a fin de que los consumidores con discapacidad puedan "gozar" de los bienes culturales, el CERMI afirma que es precisa primero la accesibilidad universal de los productos, entornos y canales culturales; sin este presupuesto, un 10% de la población española corre el riesgo de cierto de quedar excluida del mercado cultural, por lo que este no podrá crecer atrayendo a este grupo social, minoritario, pero creciente en número.
Además, no solo es lo cuantitativo, ni siquiera es lo más relevante, hay requerimientos de justicia, equidad y derechos que obligan, más allá de las magnitudes, a incluir a todos los públicos.
Como segunda gran medida, coetánea y colateral a la anterior, el CERMI propugna la de promover que en las expresiones culturales de todo tipo estén todas las diversidades sociales, también la de la discapacidad, a título de autores/creadores, y también, como "tópico", es decir, como asunto, que la producción cultural refleje todo lo que concurre y discurre en y por la vida en sociedad. Si las diversidades sociales se perciben en las ofertas culturales, bien como productoras bien como tema, se potenciará pertenencia y el consumo, extendiéndose el público general.